El error que arruinó mi primera oportunidad grande

A veces hay cosas que dices:

“Si hubiera tenido esto hace 10 años o cuando empecé, la historia hubiera sido otra…” 

Creo que eso es algo que a veces nos decimos.

Pero la realidad es que eso no existe y lo mejor es ver que aprendiste de eso para que no te pase de nuevo.

Año 2009.

Una reunión con un portal inmobiliario enorme en ese momento. Se llamaba Metros Cúbicos.

En ese momento no había tantos como hoy en día y de hecho en 2022 y 2023 se que Mercado Libre los compró.

Bueno, yo estaba emocionado.

Temblando un poco por dentro.

Me dieron la palabra en la reunión.

Y cometí el error clásico del novato que quiere demostrar demasiado:

Hablé.

Hablé.

Y hablé.

Les conté todo lo que podíamos hacer.

Todo lo que sabíamos.

Todo lo que imaginábamos.

Claro, de marketing, audiovisuales, etc.

Pero ¿qué no hice?

Escuchar.

No pregunté qué buscaban.

No entendí su situación.

No identifiqué su prioridad.

Ni su urgencia.

Ni su presupuesto.

Salí convencido de que había “impresionado”.

Pero con esa sensación de que no se quedaron con la mejor impresión.

Nunca volvieron a llamarme.

Hoy sé que una oferta no se arma hablando.

Se arma escuchando.

Ordenando.

Empaquetando.

Y comunicando en una sola idea lo que realmente mueve la aguja.

Eso es lo que hoy enseño en FreedomOS y dentro está la parte de cómo armar una oferta.

Porque puedes tener una oferta base, una central claro.

Depende de lo que vendas pero, muchas veces tienes que ajustar a las necesidades.

Tu base de la oferta puede ser la misma con ciertos ajustes.

Pero sabes, algo que no cambia esa estructura, esa claridad que das, ese paso a paso general que puedes ofrecer.

Acá ves cómo construirla.

Es exactamente lo que me habría salvado hace 16 años.

Bernardo

PD. La inversión es mínima a propósito: quiero que pruebes el método sin riesgo… y confirmes por ti mismo lo que una oferta clara puede hacer por tu negocio.